Lo más asombroso del legado político de Reagan es que logró convertirse en uno de los presidentes más populares, a base de denunciar continuamente la incapacidad del gobierno federal –su propio gobierno- para solucionar los problemas ciudadanos. Representante del derechismo más beligerante, diseñó una política exterior basada en la derrota política, económica y militar del ‘imperio del mal’ –la URSS- y una política interior cuyo objetivo fue una continuada reducción de impuestos, a cambio de reducir también servicios sociales. Logró disminuir la inflación y reducir las tasas de intereses, a cambio de incrementar los gastos militares, y liberalizar el comercio. Inició su presidencia con una severa recesión que duró de 1981-1982 y a la que siguió una gran expansión, que él consiguió atribuir a su política económica, la ‘Reaganomics’. La mejora de la situación en todo el país le hizo inmune a los escándalos de su administración –el ‘Irangate’ fue el más importante- por lo que los medios le bautizaron como ‘El presidente de Teflón’. Durante sus dos presidencias resistió impávido las críticas de la prensa liberal, que no afectaron jamás su enorme popularidad. Sabía como tratar a los periodistas, especialmente a los grandes medios informativos, a cuyos dirigentes y periodistas despreciaba. Quizá por su entrenamiento como actor tenía una gran capacidad para comunicar con sus electores sin necesidad de intermediación. Es poco conocido que antes de dedicarse a la política, incluso antes de ser actor, Reagan trabajó durante algún tiempo como locutor deportivo y como columnista de prensa…

Ronald Reagan

Ronald Wilson Reagan [Tampico, Illinois 06.02.1911 – Bel Air, California, 05.02.2004], actor y político republicano, fue el cuadragésimo presidente de los Estados Unidos.